historia

El 02 de Agosto del 1963 se creó el Liceo de Hombres de Santa Cruz por Decreto Nº 11608, dando así satisfacción al pueblo que anhelaba un establecimiento de enseñanza secundaria y respondiendo a las peticiones de Rotary Club y a las gestiones de don Carlos Cardoen , gobernador del Departamento de Santa Cruz. Esto entusiasmó al vecino don Adriano Díaz González, qué donó un terreno para su construcción, pero que hoy está convertido en Complejo Deportivo Municipal.

Este Liceo comenzó a funcionar el 1º de marzo de 1964, en un viejo edificio de 2 pisos en calle Nicolás Palacios, donde había estado la Escuela Superior Nº 1, su matrícula de 170 jóvenes de ambos sexos y distribuidos en cuatro cursos: 2 primeros, 1 segundo y un 3er año de Humanidades.

El Ministerio de Educación designó al Rector del Liceo de Hombres de San Fernando, don Osvaldo Castillo, para que organizara y supervisara este Liceo. Los profesores contratados eran normalistas que habían trabajado ad honorem preparando en forma vespertina a jóvenes con espíritu de superación que luego rendían exámenes de Validación de Estudios en San Fernando, a esa actividad se le llamó “Liceo Pedro Aguirre Cerda”. En forma permanente quedó don Edmundo Salazar como Inspector que además hacía clases de Matemáticas y como auxiliar don Augusto Zambón.


Los alumnos se presentaron por primera vez en un acto el 21 de mayo y allí se vio la necesidad que el Liceo tuviera sus distintivos, llamando a concurso para Insignia y Estandarte, eligiéndose la que tenía algo característico de la ciudad: sus “palmeras”. Su himno fue compuesto por el profesor del establecimiento don Raúl Benavides Poblete.

Se formó el Centro de Padres presidido por don Juan Oyarzún, una de cuyas prioridades fue formar una Biblioteca, en lo que colaboraron en forma entusiasta la señora María Zala de Sáinz y don Antonio Oyarzún Lorca, Ésta con el tiempo fue creciendo y finalmente se contrató a una persona para su atención, la señorita Patricia Acuña quien se mantiene hasta hoy en esa función.

Los alumnos eligieron su Centro y su primer presidente fue Daniel Alvarado Cádiz.

Terminado el primer año académico con muy buenos resultados surgió la necesidad de nuevos cursos y la matrícula aumentó a 289 alumnos. Fue necesario rescatar nuevas salas del 2º piso y mientras esto sucedía algunos cursos debieron trabajar en salas facilitadas por la Cruz Roja, Bomberos y Asociación de Fútbol. También llegaron nuevos profesores especialistas en sus materias y se nombró Rector a don Raúl Vargas, quien estuvo sólo unos meses por motivos de salud, falleciendo en San Fernando, debiendo asumir el cargo por todo el año la profesora de Historia y Geografía la señorita Gladys Olivares Naranjo, que trabajaba en el colegio desde su inicio. Desde el Liceo de Niñas de San Fernando se trasladó a trabajar al Liceo como Inspectora la señora Elvira Farías.

El Liceo celebró su aniversario con actividades internas, acto solemne, saliendo a la comunidad con disfraces, acompañando a su reina con carros alegóricos. Visitó el monumento de don Nicolás Palacios; esta tradición luego la siguieron otros colegios. Se formó el Comité de Bienestar y la Cruz Roja Juvenil.

El 1º de Marzo de 1966 asumió la dirección del Liceo don Genaro Poblete Cárcamo y con él nuevos profesores especialistas. Se vio la necesidad de más salas y se hicieron 2 salas como mediaguas para los nuevos cursos y el Comité de Bienestar con la ayuda de apoderados, comerciantes empezó a entregar desayuno y almuerzo a los alumnos que viajaban del sector rural y otras comunas. También para ayudar en emergencias se organizó la Cruz Roja de la Juventud. La alimentación continúo en el Liceo con el sacrificio de muchos hasta que lo tomó la Junaeb.

En el año 1967 se creó la Inspectoría General y asumió el cargo la profesora Señorita Gladys Olivares Naranjo. La matrícula subió a 364 alumnos y ese año se tuvo la satisfacción de entregar a 24 alumnos su Licencia de Enseñanza Secundaria; en el mes de diciembre.

En 1968, el Liceo se trasladó a su nuevo edificio de Avenida Sur esquina Avenida Errázuriz y el sitio que había donado el Señor Díaz quedaría para deportes y con los años la Municipalidad formó el Complejo Deportivo.

En este local se tuvo que trabajar mucho porque hubo que pavimentar el patio central, construir un espacio para comedor, cerrar un lugar para Gimnasio que hoy son salas de clases y adecuar un patio para multicancha. Para esto se contó con excelentes directivos del Centro General de Padres, podemos recordar a los señores José Cisternas, Miguel Torrejón y Emilio Farías.

Con los años se pudo construir el 2º piso en el sector de avenida Errázuriz y en el interior una Biblioteca; en el último tiempo creció hacia el lugar que fue usado por el Instituto Politécnico y hoy comparte este sector con el Liceo de Adultos.

El año 1969, al Liceo le correspondió la tuición de los colegios María Auxiliadora y el Instituto Regional Federico Errázuriz hasta que se realizó la Reforma Educacional.

El Rector Sr. Poblete fue trasladado a Taltal y asume el cargo la Inspectora General hasta la llegada del nuevo Rector don Jorge Vuscovich, que estuvo poco tiempo por acogerse a retiro llegando don Raúl Opazo en 1973, permaneciendo solo unos meses, debiendo asumir nuevamente la Inspectora General hasta el año 1976 fecha en que la Señora Regina Alfaro asume la dirección permaneciendo en ella hasta el año 1993 pasando a dirigir el Liceo de Adultos; el año 1994 asumió la dirección don José Venegas hasta el año 2003 y por motivos de salud cada cierto tiempo era subrogado por la subdirectora.

En 1973 se creó el anexo de Pichilemu y en 1978 los de Chépica, Peralillo y Marchigüe, todos estos anexos dieron origen a Liceo dependientes de las Municipalidades respectivas.

El año 1979 pasó la Escuela Media de Adultos al Liceo como jornada vespertina y su Rector don Mario Galarce pasó a ser Subdirector del establecimiento, permaneciendo en el cargo hasta 1981, fecha en que asumió la jefatura del Daem. Asumió como Subdirectora en 1993 la señora Eliana Gutíerrez.

Con el crecimiento de los cursos y número de alumnos se tuvo que crear el cargo para otro Inspector General y podemos recordar a don Arcadio González, don Manuel Prado ,señora Magali Vargas, señor Francisco Campos y hoy don Víctor Cornejo.

Desde el año 2004 dirige el Liceo don Francisco Campos y el Señor José Venegas pasó a Inspectoría General.

En la evolución del Liceo, debió funcionar la Unidad Técnico Pedagógica y allí podemos recordar a don Carlos Jarpa, señora Dolores Martínez y hoy don Julio Migueles.

De aquí depende la Orientación en que se puede recordar a la señora Magali Vargas a quien le correspondió organizar la Escuela para Padres y chequeos de salud; la señora Georgina Contreras, señora María Dina Urzúa, señor Roberto Rojas, señor Juan Espinoza, y la señora Norma Castro hasta ahora. Se agrega a este departamento un Asistente Social y un Psicólogo.

Cuando los Liceos de Chile se clasificaron por letras según su matrícula, el nuestro pasó a ser Liceo B-17, pero finalmente desde 1993 es Liceo Santa Cruz, por un acuerdo Municipal y el sentimiento de todos.

En la vida del Liceo siempre se ha visto el interés de los alumnos y personal por hacer publicaciones dando a conocer sus actividades y pensamientos, así recordamos: 4 Planas, La Voz del Estudiante, Inquietudes Liceanas, El Liceano, Ecos Liceanos.

Los Liceanos en su vida estudiantil han tenido destacadas actividades a nivel local, provincial e interprovincial, como el grupo de Gimnasia guiado por don Pedro Navarro y Olga Astorga, Coro Polifónico dirigido por don Guillermo Burgos y luego el Grupo Experimental de Música dirigido por el señor Mario Iriarte, Grupo de Artes a cargo de los profesores señores Patricio Martínez y Hugo Albornoz, Gimnasia Rítmica de la señora Carolina Cid.

En estos 53 años han egresado miles de alumnos y muchos de ellos tienen sus títulos Universitarios en diferentes áreas, gran número de profesores, agricultores, empresarios, etc. y que se encuentran a lo largo de nuestro país y los que residen en la ciudad integran el Centro de Exalumnos que funciona desde aproximadamente 30 años, celebrando cada aniversario con cena bailable, un obsequio al colegio y otorgando una beca a un alumno que continúe estudios superiores